Pequeños milagros-Nunca pierdas la fe-

Hoy sucedió algo inesperado para mí. Como todos los lunes, me cuesta un poco arrancar, pero así y todo anduve a las corridas. Te bañé y cambié para el jardín, te puse el uniforme, campera y mochila, esperando que la tires apenas salimos de casa, para yo levantarla y colgármela al hombro. Una cuadra antes de llegar al jardín me dije asustada -"la mochila". Para sorpresa mía, tenías la mochila puesta. No te la sacaste. Caminaste las cuatro cuadras con la mochila puesta como la mayoría de los nenes hacen. Mi emoción fue tremenda, como con cada logro tuyo.

Este acto del que hablo, de llevar puesta una mochila, es algo normal, que para la mayoría de los padres pasa desapercibido, pero para mi, esto es algo muy importante... Desde Julio del año pasado que vas al jardín y nunca lo habías hecho. Estos días pasados venia notando que te la dejabas unos pasos para luego tirarla, pero esto de ir y venir es SUPER IMPORTANTE. Habla de que estas empezando a organizarte, estas teniendo sentido de la propiedad, al comprender que esa mochila es tuya, te pertenece, y es tu trabajo llevarla, como el resto de los amigos hacen.

Al salir del jardín, tenías la mochila puesta y también la llevaste todo el camino. Apenas llegó tu papá le conté. También a la madrina, que llamó por teléfono, a la abu Emilia, y a Luciana, tu terapista ocupacional, con quien haces Integración sensorial. Este es un logro tuyo, y también de todo el equipo, porque cada terapeuta, desde su labor, trabaja para ayudar a que cada día puedas ser mas independiente, y puedas valerte por vos mismo. Igual, siempre vamos a estar con vos, apoyandote, mimandote y amandote.

Cada día que pasa, agradezco a Dios el poder tenerte. Sos un ángel, Agus. Te amo.

Esto es un milagro.

Un pequeño pero gran milagro.